Este curso
hemos tenido que leer El Lazarillo de
Tormes y una adaptación de La
Celestina. Me han gustado algunas cosas de ellas, pero en general, son
obras que no he acabado de entender, por su lenguaje antiguo y porque las formas
de vida y preocupaciones de los
personajes principales están muy lejos de mi realidad. No las he disfrutado.
Me gustaría que
en clase nos mandasen para leer libros más actuales, más entretenidos, de
aventuras o de ciencia ficción, como El
juego de Ender. Lo estuve leyendo porque me lo regalaron para reyes y ha
sido una de las lecturas que más me he disfrutado en mi vida.
El año
pasado, por ejemplo, en clase de valenciano, nos dejaron elegir el que
quisiésemos, yo me decanté por Crepúsculo,
porque había visto las películas y porque una amiga se lo estaba leyendo. Me
gustó porque los protagonistas tienen rasgos que hacen que me identifique con
ellos y la historia está llena de aventuras y elementos sobrenaturales. Aunque
tengo que decir que, gracias al profesor, nos dimos cuenta de que contiene
muchas ideas machistas.
El profesor
me dijo que si me había gustado Crepúsculo,
me encantaría leer La hija de la noche, de Laura Gallego. Y en verdad acertó. Me lo
leí con mucho gusto para la siguiente evaluación y saqué muy buena nota en la exposición.
Recuerdo
otros libros que nos han mandado para leer otros profesores, pero la verdad es
que no hay ninguno que me haya marcado demasiado. La verdad es que me gusta
leer, pero a veces me canso rápidamente, prefiero ver la tele: me encantan las
películas de ciencia ficción, como Los
juegos del hambre.
Y por
gustarme, lo que más me gusta es jugar a videojuegos, que también son
literatura, claro que sí. El que más me gusta es el juego Wow: a veces quedamos
algunos compañeros y yo para realizar aventuras virtuales conjuntas. Nos lo
pasamos genial. Ojalá me pusiesen nota por ello en el cole.
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